Con más de seis meses de aislamiento social, muchas personas empiezan a manifestar un cansancio mayor que años anteriores en estos meses. ¿El por qué? La superposición de tareas laborales, domésticas y parentales.
Desde que comenzó la pandemia, más del 30% de los colaboradores han tenido que ser maestros, empleados, padres y/o cuidadores, todo a la par con sus jornadas de trabajo. Y es que con los cambios de horario y las clases virtuales, poder equilibrar todos los roles que desempeñamos a diario se volvió un verdadero reto para más de uno.
Esto se puede ver en el informe de ManpowerGroup: Lo que los trabajadores quieren. De este modo, queda en claro que la falta de preparación para poder enfrentar esta crisis y el repentino cambio de hábitos en todas las familias e instituciones demandó mucho esfuerzo y energía para generar una adaptación activa al cambio.
A su vez, el estudio resalta las bondades que los colaboradores le atribuyen a cada espacio:
Lugar de trabajo:
Y en consecuencia, qué esperan del futuro:
Ahora es el momento de repensar la forma en que las personas trabajan, son reconocidas y recompensadas, especialmente con los padres y particularmente con las mujeres, quienes todavía realizan la mayoría de las actividades domésticas y de cuidado en muchos hogares.